El proyecto permitió profundizar en la necesidad de aplicar una aproximación “seria” y rigurosa de la gamificación, basada en mecánicas y dinámicas y en el uso de elementos de juego para motivar a la acción; y en precisas investigaciones que demuestran que lo memorable, lo divertido y lo placentero se transfiere y se retiene mejor y tiene mayor potencial para provocar los cambios buscados en las conductas y los comportamientos de los usuarios.
Se evidenció que utilizarla adecuadamente requiere superar el nivel básico de rankings, medallas y premios (es decir el clásico “PBL”) para convertirla en un arma absolutamente transformadora, con un potencial inabarcable que conecta con nuestros motivadores más profundos.
Codo a codo con nuestros partners europeos de Turquía, Finlandia, Italia, Francia, Rumanía, Reino Unido… especialistas en transformación social y gamificadores, exprimimos ese potencial de la gamificación para ayudar a este colectivo de parados de larga duración a impulsar de nuevo su vida profesional.
Así, el proyecto “Gamification for hard-to-reach adults” permitió: